Pigro, como Roma, no se construyó en un día.
Todo empezó con un algoritmo. Luego, vino su uso.
¿Cómo podría una fórmula diseñada -en términos generales- para ayudar a la gente a encontrar contenidos satisfacer una necesidad real?
Inicialmente, Pigro era un agregador de noticias que ofrecía un resumen de la información más relevante del día, evitando las repeticiones textuales y ofreciendo al usuario un contenido sintetizado y eficaz.
Pero el mundo de las noticias era difícil de monetizar y ya estaba superado, así que decidimos inspirarnos en lo que eran las tendencias en el extranjero.